A FESTA DOS FACHÓS DE CASTRO CALDELAS

Encendido dos fachós.

Ésta fiesta se celebra cada 19 de Enero en Castro Caldelas (Ourense) desde siglo XVIII, lo que la convierte en una de las fiestas más antiguas de Galicia. Se cree que se inició debido a una gran peste que asoló ésta región en 1763 adquiriendo, los fachos, una función desinfectante y purificadora. También se cuenta que, durante ésta peste, fueron varias las personas que vieron a Dios y que les dijo que la peste terminaría tan pronto como construyesen un altar en honor a San Sebastián. Así lo hicieron y la peste cesó, celebrándose el día dos fachós hasta la actualidad. También hay quien dice que es una forma de mantener la tradición de la siembra, siega, recogida y malla de la paja, ya que ésta zona era conocida como "el granero de Ourense" por la cantidad de centeno que producían sus tierras.

 Os fachós son grandes antorchas de paja y si lo vuestro no es quedarse mirando el espectáculo, no tenéis más que acercaros hasta la plaza de la iglesia, ya que hay fachós disponibles para quien quiera participar. A partir de las 19h arranca la procesión, precedida por un gran San Sebastián de paja, el fachón grande y gaiteiros. Es muy impresionante de ver, ya que se junta una gran cantidad de gente (500-600 personas) cada una con su fachó encendido, recorriendo el casco histórico de ésta localidad. Se termina en el lugar de origen, la plaza de la iglesia, no sin antes pasar por las inmediaciones del castillo, del siglo XI. Antiguamente, cada barrio elaboraba su fachó y competía con los vecinos para ver cuál era el de mayor tamaño. Hoy en día, se elabora sólamente un gran facho en representación de todos, teniendo el record uno de 40m de largo, y es el que acompaña a San Sebastián en la cabecera de la procesión.

Procesión dos fachós de Castro Caldelas.

Una vez de vuelta al Santuario dos Remedios, se indulta la imagen de San Sebastián y se reunen todos los fachós para encender una gran hoguera alrededor de la cual los asistentes pueden cantar y bailar hasta que el cuerpo aguante, además de comer, ya que también tiene lugar una fiesta gastronómica. Por un módico precio se podrán degustar chorizos caseros, vino de la Ribera Sacra y postre típicos entre los que no pueden faltar la bica y el licor café.

Hoguera realizada con los fachós en frente a la iglesia. Fotografía tomada de Farodevigo.es

Os dejo un vídeo de la fiesta del año pasado. ¡No os la perdáis!

LA TORRE DE HÉRCULES Y EL ESPEJO MÁGICO

Por todos es conocida la leyenda de la Torre de Hércules y el gigante Xerión. Para los despistados, os la cuento muy brevemente: Xerión era un maligno gigante de tres cabezas que vivía en la antigua Coruña y que obligaba a sus súbditos a entregarles todos sus bienes e, incluso, a sus propios hijos. Los habitantes de ésta región estaban atemorizados y cuando Hércules llegó a éstas tierras en una copa de oro, le suplicaron ayuda. Se produjo así una larga batalla a muerte que duró 3 días. Hércules se saldó con la victoria superando así una de sus doce pruebas, ¡por algo llegó a convertirse en Dios! y sobre la cabeza de éste gigante mandó construir la Torre de Hércules. Se cuenta también que la primera persona en repoblar éstas tierras, libres ya del gigante, fue una mujer llamada Cruña, bautizando la ciudad con éste nombre.

Derrota de Xerión, victoria de Hércules.

Pero lo que os quiero contar hoy es una leyenda relatada por Alfonso X el Sabio y recogida por Jesús María Reiriz Rey, escritor contemporaneo nacido en la ciudad de cristal.

Una vez que Hércules derrotó al gigante, comenzó a edificar una torre en el Cabo la Crunna para conmemorar su victoria. Ésta torre la terminó de alzar su sobrino Espán, el cual era muy sabio y ordenó construir un gran espejo para poner en la cima y poder ver así las naves que se aproximaban por el mar desde muy lejos, pudiendo precaverse de los enemigos con notoria anterioridad. Años más tarde, unas gentes llamadas almujuces (procedentes de lo que hoy día es la Bayona francesa) escucharon hablar del citado espejo y planearon destruirlo. Para ello cubrieron sus barcos con árboles verdes de forma que se asemejasen a unas islas. Y, aunque parezca mentira, éste engaño funcionó, pudiendo llegar a tierra y romper el espejo. De ésta forma consiguieron entran en la ciudad para conquistarla.

La parte mágica de la leyenda reside en el carácter que suscitan los espejos en la cultura popular. Así, los espejos devolvían imágenes que habían acontecido en el pasado, o reflejaban aquello que un día había estado frente a él y en la actualidad se encontraba en la lejanía. También eran capaces de desviar influencias maléficas. Por otro lado, en la tradición mitológica irlandesa los espejos se consideran un medio que nos vincula con el Más Allá. Éste hecho puede explicar la costumbre que aún existe en algunas zonas de Galicia de cubrir cubrir los espejos de la casa o ponerlos de cara a la pared cuando alguien fallece, para evitar así que el espíritu errante se lleve a los vivos a través de él mientras no se le da entierro.

Sin embargo, no todos comparten la idea acerca de que en la Torre de Hércules existiese un espejo. Florián Ocampo sostiene que el origen de ésta creencia reside en la semejanza que existen en latín entre los vocablos specula (atalaya) y speculum (espejo). Otros, como José Cornide Saavedra, sostienen que la leyenda es una adopción del Faro de Alejandría.

Torre de Hércules. Fotografía tomada de galiciaunica.es